domingo, 13 de diciembre de 2020

Ventajas de ser introvertido en cuarentena

 Primero que nada hay que aclarar que ser introvertido no es ser anti social, un introvertido viene a ser una persona que no expresa sus emociones y pensamientos de forma tan espontánea como las demás, mientras que un antisocial es aquel que rechaza tener una vida social. Ambos gozan de ciertos beneficios en estos tiempos de crisis dónde nos vemos obligados a permanecer en casa y evitar entrar en contacto con personas del mundo exterior. Ya que la socialización es una necesidad humana la frecuencia con que se lleva a cabo puede causar muchas repercusiones en nuestra vidas. Socializar es como una droga... ok quizás esa no sea la mejor forma de escribirlo. Creo que la mejor analogía sería compararlo con el alcohol. Especialistas creen que consumir algo de alcohol al año puede ser beneficioso para el cuerpo, pero si consumimos mucho entonces nos hará daño y generará adicción. Lo mismo pasa con la socialización humana, si consumes mucho de ella te volverás un adicto que en tiempos de cuarentena te causará síndrome de abstinencia. Más abajo les contaré un caso de alguien que sufrió esto.


1. Menos probabilidad de ansiedad:

Decir que los introvertidos no sufren de ansiedad sería mentir. Pero algo que sí puedo decir con seguridad es que tenemos menos razones para estar deprimidos por no salir ya que no sufrimos del síndrome de abstinencia causado por dejar de socializar de golpe. Mi hermano tiene un amigo super extrovertido de la clase de personas que cada semana está dando una fiesta o asistiendo a una. Pongámosle de nombre Federico ¿Cómo creen que se siente Federico ahora que lleva meses sin poder salir? Para que se hagan una idea de su estado actual les diré que tiene que ir a terapia virtual, al pobre le dio depresión severa y llora cada cierto tiempo. Entiendo que alguien que viva de sus ingresos que obtiene en un trabajo en la calle se deprima, porque el ya no poder trabajar por culpa de la pandemia sin duda le causará dificultades, pero es ridículo ver este cuadro de depresión en alguien que no le falta nada en su casa ni tenga problemas familiares que le motiven a salir de ahí.



2. El cambio de rutina no es tan grave

Cómo dije, ser introvertido no es ser anti social, pero en algunos casos la diferencia es tan poca que es fácil confundirse. Hay quienes tienen la costumbre de no salir de casa si no es ABSOLUTAMENTE necesario. Por lo que ese estilo de vida los entrenó perfectamente para la cuarentena, la única diferencia primordial sería levar mascarilla. Acostumbrarse al cambio es necesario para que sobrevivir e incluso para la evolución, por lo que la supervivencia del más apto debería apoyar a los introvertidos mientras la humanidad pasa por todos los cambios a su estilo de vida en el 2020.


En conclusión, en tiempos de aislamiento y cuarentena lo mejor es ser introvertido. Al serlo tienes un estilo de vida perfectamente equilibrado entre socializar lo necesario para satisfacer tus necesidades humanas pero no tanto como para que al dejar de hacerlo sufras todo lo que sufre el resto de personas que lastimosamente generaron adicción a la socialización.

martes, 1 de diciembre de 2020

5 tipos de roommates molestos

 Un buen roommate puede ser de mucha ayuda, sobre todo si no puedes pagar solo la renta o si eres alguien que no soporta la soledad (el cual NO es mi caso). Pero también está la posibilidad de que tengas que convivir con alguien totalmente insoportable que te haga extrañar la soledad. Así que estos son 5 tipos de roomates molestos.

1. El dotero (o lolero, o en general un gamer):

Seguro que muchos somos conscientes que las personas podemos hacer mucho ruido cuando vemos un partido de futbol, gritamos y le hablamos a la pantalla como si los jugadores nos pudiesen escuchar, el consuelo para las personas que no soportan esa bulla es que no siempre están pasando partidos importantes, por lo que esa ola de gritos ocurre con una frecuencia no muy elevada. Pero cuando tienes un roommate dotero (o lolero) este se puede pasar todo el día gritando a la pantalla sin parar, pues en este caso los jugadores sí le pueden escuchar, y como una partida online puede hacerse en cualquier momento, la frecuencia con la que hará ruido es sorprendentemente alta.


2. El desordenado:

Te despiertas, vas desayunar y en el camino vez un montón de cosas tiradas por el suelo y al llegar a la cocina vez los platos usados por tu roommate la noche anterior que se olvidó de lavar. Sabes que él no los va a lavar nunca, así que lo tendrás que hacer tu además de hacerte tu desayuno. Tratas de prepararte algo pero tu roommate dejó la comida sin guardar, así que ahora además de comer debes gastar la poca energía con la que despertaste para poder hallar la comida que el roommate dejó en algún lado. Al final del día cuando vuelves a tu hogar vez que no solo no recogió nada de lo que dejó tirado por el lugar sino que hay todavía más cosas tiradas: un casaca en el sillón, unas toallas sobre TU cama, etc. Tu roommate es listo, porque sabe que al poner cosas en tu cama las vas a tener que ordenar tu, y no servirá ponerlas en la cama del roommate porque él solo las pondrá en otro lado hasta el día siguiente y luego las volverá a poner en tu cama dejándote bien claro que si no eres tu quién ordena las cosas el otro jamás lo va a hacer.



3. El roommate con insomnio:

Imagina que son las 12 de la medianoche y piensas en irte a dormir para poder alcanzar las 7 horas de sueño, pero eso será muy difícil si tienes un roommate que no puede dormir porque tiene mucho trabajo que hacer, quiere ver su maratón de su serie favorita, o porque no tiene sueño. Al final aunque sea él quien esté despierto gastando sus neuronas sin descanso, también tu te mantendrás despierto, porque el roommate se ríe como si fuera hiena o se queja en voz alta cuando le pasa algo al protagonista de la serie. No importa lo que pase tu no dormirás hasta que le de sueño.



4. El que siempre está hablando por teléfono:

¿Saben cuál es el problema de tener que hablar por teléfono en vez de hablar cara a cara? Que hay mayor posibilidad de que alguien más se entere de lo que están hablando. Si tu roommate tiene muchos amigos(as) o gente con la que habla seguido es su problema, pero si lo hace hasta cuando está cerca a ti te terminas enterando de todo lo que pasa entre ellos. Quieras o no descubres cosas que hubieras preferido no saber, porque ese socio-adicto se la pasa hablando en voz alta como si fuera el único que vive ahí.



5. El demasiado inteligente:

En la teoría del big bang Leonard nos demuestra lo mucho que se puede sufrir al vivir con alguien con demasiada inteligencia. No es que la inteligencia sea algo malo, pero alguien demasiado inteligente puede resultar difícil de tratar, sobre todo si él es consciente de que a tu lado él parece ser el mismísimo Einstein y tu solo llegas al nivel intelectual de un asno. Si hay algo peor que tratar con alguien que se siente superior a los demás, es que tenga motivos fuertes para creerse superior. Solo imagínate intentando hablar con el roommate para dar tu opinión o aportar con una idea y así poder demostrar que él no es el único con cerebro, pero al final solo terminas quedando como un idiota, porque cualquier cosa que pienses él ya la ha pensado y mejorado, es como que una leña se acerque a una hoguera para tratar de apagarla, lo más probable es que se muera y que termine avivando más las llamas.



El efecto Lewis Carroll

Odio la poesía. Y no suelen gustarme los villanos. Me aseguro que muchos lo sepan. Pero por alguna razón cuando escuché el poema de La morsa...