lunes, 7 de febrero de 2022

Anécdota #3 Como NO hacer una fiesta sorpresa

 Primero que nada, esto no es una guía sobre fiestas sorpresa, es una anécdota de como gente no capacitada para la materia decidió dar una fiesta sorpresa.

Tengo una amiga a la que llamo presidenta, ella se iba de viaje y junto con su madre y otros amigos planemos hacerle una despedida. Lo primero que necesitábamos era que la madre de la presidenta la sacara de casa el tiempo suficiente para que sus amigos entremos y arreglemos la casa como para una fiesta. Su madre nos dijo que nos dejaría la puerta abierta para que podamos entrar ya que nosotros no teníamos la llave. En cuanto la presidenta y su madre se fueron nos dirigimos a la casa para descubrir un pequeño detalle. La casa tenía una reja que bloqueaba antes de llegar a la puerta, y la madre olvidó dejarla abierta. Estuvimos unos minutos pensando qué hacer hasta que decidimos que alguien tendría que pasar por encima para abrir desde adentro. ¿Quién creen que fue el elegido para llevar a cabo esa tarea? Respuesta: yo. Me puse en modo delincuente juvenil y pasé por encima esperando a que ningún vecino me viera para que no piensen que era un ladrón. Les abrí la reja a mis compañeros y luego entramos por la puerta de la casa que en efecto estaba abierta.

Entramos y empezamos a poner los piqueos que compramos en bandejas y luego nos pusimos a decorar. Nos tardamos pensando sobre cómo decoraríamos, cómo poner los globos entre otras cosas. Ninguno de nosotros fue un gran artista en las clases de arte del colegio pero nos esforzamos igual.

Cuando todavía estábamos a la mitad de la decoración nos llegó un mensaje de la madre de la presidenta para avisarnos que estaban regresando a la casa. Entramos en pánico, hicimos varios cambios prácticos y muy necesarios a lo que pensábamos hacer en las decoraciones para que nos llegue a alcanzar el tiempo. Logramos terminar quién sabe como y después llegó la parte en la que nos teníamos que esconder para salir gritando ¡Sorpresa!

Pero ahora viene otro problema. La casa tenía dos entradas. Una por la que entramos, y otra que quedaba detrás de la casa. No sabíamos por donde iban a llegar, así que estuvimos cambiándonos de escondite cada 2 minutos porque escuchábamos ruidos de alguna de las puertas y pensábamos que ya estaban entrando. Estuvimos en ese plan de cambiarnos de lugar una y otra vez hasta que por fin llegaron y estaban por entrar en la puerta por donde llegamos y ahora sí nos quedamos en un solo lugar.

Pero hubo otro problema, la puerta no habría. Desde nuestro escondite pudimos escuchar como la madre de la presidenta sacudía la llave en la cerradura sin poder abrir la puerta. Lo primero que pensé es que hacía ese ruido a propósito para que nosotros sepamos que ya llegaron y por cuál puerta. Pero no era así, era que la puerta no abría, lo que me hizo sentir bastante mal porque yo fui la ultima persona que la cerró.

Luego de varios minutos en los que estuvimos escondidos escuchando como no podían entrar, una chica del grupo de amigos escondidos salió a abrirles la puerta. (¿No les dije no que estábamos capacitados en la materia?) Luego de abrirles volvió corriendo al escondite y cuando la presidenta con su madre entraron salimos todos a gritar ¡SORPRESA!

Ella se alegró pero nos dio la noticia de que ya sabía sobre la fiesta. Por el comportamiento inusual de su madre de hacerla salir de la nada y porque unos días atrás ella estaba en zoom con sus amigas y una de ellas mientras compartía la pantalla sin querer dejó ver su whatsapp donde se veía la conversación del grupo de la fiesta sorpresa. (Como dije no estábamos capacitados para esto.)

Pero lo importante es que la presidenta se alegró igual y la pasamos bien en la fiesta.

En conclusión, tengan cuidado cuando compartan pantalla por zoom u otra plataforma, ya que puedes mostrar conversaciones que la gente no debería ver, y si vas a hacer una fiesta sorpresa a alguien asegúrate de tomar todas las precauciones necesarias para que no pasen las cosas imprevistas que nos pasaron a nosotros.

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